Después de mucho tiempo vuelvo a escribir. Me faltaba la motivación, el tiempo para desarrollar un artículo y un contenido de calidad. Remediados todos estos problemas, espero volver a traer artículos interesantes de leer.
Antes de nada, vamos a explicar un poco cual es el objetivo de este artículo. El objetivo es introducir a la mejor filósofa malagueña, María Zambrano, al público general, de una manera un tanto sencilla pero a la vez profundizando un poco en el contenido de su obra, Filosofía y Poesía. Sin más dilación, vamos a comenzar con ello.
BIOGRAFÍA MARÍA ZAMBRANO
María Zambrano nace el 22 de abril de 1904 en Vélez-Málaga. Su infancia transcurrió en Segovia hasta que en 1924 se muda a Madrid para cursar sus estudios de filosofía hasta finalizarlos en 1927. Clara Janés en “Desde la sombra llameante” en un libro introductorio a la obra de la filósofa malagueña, nos narra el amor que le tenía María a uno de sus maestros, Ortega y Gasset, al punto de que cuando su maestro criticó su ensayo ella salió desesperada llorando a la Gran Vía por su desaprobación, reconociendo, además: “… malentendidos con Ortega que me estimaba, que me quería. Y yo a él. Pero había como una imposibilidad”1. En aquellos tiempos colaboraba además en las llamadas Misiones Pedagógicas en la época republicana con muchos otros escritores y artistas coetáneos de la talla de Rosa Chacel o Miguel Hernández.
A su vuelta del exilio en 1981, María Zambrano vuelve entre honores, siendo nombrada por el Ministerio de Educación Catedrática Extraordinaria. Después de ser publicado en 1982 en la Universidad de Málaga un libro sobre ella por numerosos autores, es finalmente nombrada Doctora “Honoris Causa” por la Universidad de Málaga, siendo reconocida su obra después de tanto tiempo de exilio a causa de la Guerra Civil. En 1983, María Zambrano enferma hasta el punto de tener que ser ingresada en un hospital de Ginebra2, ya que sufría anemia, artrosis y quedándose ciega a causa de las cataratas que ella padecía. A pesar de todo ello, siguió publicando libros con una frecuencia espectacular, además de serle concedidos galardones como el Premio Cervantes o ser nombrada Hija Predilecta de Andalucía en 1985. Al final de su vida y a pesar de su inmovilidad, ya que no se sostenía en pie, necesitaba de una silla de ruedas y casi no podía articular palabra, siguió acudiendo a actos y escribiendo libros con pundonor, siguiendo incluso la actualidad de la guerra del Golfo Pérsico y escribiendo un artículo “Peligros de la paz”3 en noviembre de 1990. Tras toda esta ajetreada vida, muere en 1991 en el hospital de la Princesa, dejando tras de sí una obra de casi 7 décadas.
FILOSOFÍA Y POESÍA
Después de haber dado algún que otro apunte bibliográfico toca adentrarnos en el punto principal del artículo, la explicación de la obra de Zambrano que acabo de leer, Filosofía y Poesía.
Primeramente, a lo largo de la obra hay algo que se mantiene estático y que es el hilo conductor de la obra, la crítica a Platón, ya que el clásico griego condenó brutalmente a la poesía y eliminó su valor por completo frente a la razón. María describe distintas causas de por qué lo hace. Platón la rechazaba debido a que los poetas se guían por las apariencias, se adhieren a ellas, siendo estas falsas (al ser apariencia), mientras que el filósofo se guía por la razón, lo que mayor valor tiene en la vida según Platón4. Otra crítica es que el poeta tiene una unidad incompleta, lo sabe y gusta de ella, mientras un filósofo quiere la unidad completa y la busca. ¿Pero qué es la unidad? Yo lo traduciría a un lenguaje menos técnico a todo lo que conocemos, por ello muchos filósofos crean sistema (para explicar el todo) mientras que los poetas no buscan nada de eso.
Aristóteles (como discípulo de Platón) al comienzo de su obra “Metafísica” escribe: “Todos los hombres tienen por naturaleza deseo de saber”, sin embargo, Zambrano no cree que esto sea así5 y apostilla que el filósofo no quiere conocer la verdad6 y además para ellos la palabra es el medio para excluir ciertas mentiras.
En su República, Platón plantea un modelo de sociedad ideal. Aquí Platón condena de nuevo a la poesía, al ser falsa y carente de razón, lo que la hace ir en contra de la Justicia y su modelo, que está regido por un sistema totalmente racional. No será hasta el siglo XIX hasta que Nietzsche7 defienda a capa y espada la influencia de la irracionalidad de los seres humanos. Esto es debido a que el ser humano, como podemos ver, se guía frecuentemente por la irracionalidad y sus pasiones.8 La poesía escapa de la verdad, la rechaza, se mueve por los sentimientos más banales, por eso es rechazada y ha sido crucificada, pisoteada y denostada por muchos años. La poesía es la expresión más pura del querer, cosa que va totalmente contra la razón.9
Otra distinción entre poeta y filósofo es que el filósofo busca continuar el camino, buscar la razón y el sentido de la vida paulatinamente, mientras que los poetas se quedan enganchados en una zarza por el camino que les obliga a ser fieles a lo que ya tienen.10
A mí sin duda lo que más me ha llamado la atención es la crítica a Platón por ser religioso. Según Zambrano, al tener él fuertes creencias teológicas y creer en reencarnación del alma, pura y virginal, al contrario del cuerpo, sucio y cárcel del alma.11
Segundo, en la obra Zambrano se hace una clara diferenciación en el uso de la palabra, tanto por parte del filósofo como del poeta. Según María, el filósofo usa la palabra, mientras el poeta es esclavo de ella. ¿Por qué es así? Bien, esto tiene relación con lo que hemos explicado anteriormente, el filósofo usa la razón para avanzar, usa palabras (porque sino no se le entendería) para construir ese sistema y para explicar esa unidad. Las usa a su antojo para crear libremente. En cambio, el poeta es esclava de ella, porque esas palabras son necesarias e imprescindibles para él para formular las frases y añorar sus recuerdos, sino no se le entendería lo que quiere expresar. Necesita verbalizar unos sentimientos que realmente no puede verbalizar, las palabras tienen una carga emocional tamaña, por ello el poeta es esclavo de ella, porque su voluntad no se impone a lo que quiere realmente transmitir y la palabra lo somete a hacerlo como ella quiere.
Finalmente, en el libro aparece el concepto de angustia. Aquí la filósofa malagueña se apoya en Kierkegaard, otro de sus maestros, para explicarlo. Estas páginas, aunque breves, están tan cargadas de psicología que merece la pena comentar estos fragmentos. Zambrano escribe: “la angustia es la posibilidad de libertad”. Podríamos ejemplificar esto de una manera sencilla: imaginemos que estamos presos en una cárcel de manera injusta, privándonos de ver a nuestra familia. La tristeza que sufrimos (angustia) es causada principalmente porque nos privan de algo básico del ser humano, la libertad. Otra manera de sentir angustia según la filósofa es ante la incapacidad de crear. Imaginad que somos el arquitecto de una casa a crear, ver que partimos desde cero sin una base a merced de lo que tu cabeza imagine nos angustia, porque no sabemos hacia dónde tenemos que ir12. Otra cosa que nos angustia según Zambrano es la prohibición, en lo que yo disiento, ya que la prohibición nos causa más que angustia curiosidad13.
Ya hemos desgranado la totalidad del libro de Zambrano. Es una obra corta pero se hace dura a la hora de leer si no has leído mucha filosofía en tu vida. La belleza y la musicalidad que imprime Zambrano a sus relatos es única y no podemos negar los avances en el pensamiento filosófico que ella hace, categorizando y definiendo claramente lo que es un poeta y lo que es un filósofo. Además, nos da esos pequeños consejos de autoayuda en relación a la angustia sobre los que podemos reflexionar en el día a día.
BIBLIOGRAFÍA
Filosofía y Poesía, María Zambrano 1939.
María Zambrano. Desde la sombra llameante, Clara Janés.
https://www.fundacionmariazambrano.org/
Me ha parecido una anécdota tanto curiosa que la he añadido por la importancia de estas dos figuras en la filosofía del siglo XX y por adentrarnos un poco en esa faceta amorosa que Janés nos narra.
Donde vivió cierto tiempo de su vida en distintos periodos, tanto exiliada como después de aquella época, esto lo narra también espectacularmente Clara Janés.
Enlace a “Peligros de la paz” https://www.elviejotopo.com/topoexpress/los-peligros-de-la-paz/
Recomiendo leer el Mito de la Caverna para entender este ensayo con mayor exactitud.
Y ni mucho menos es así viendo a la población actual.
Ya sabéis, porque tienen una unidad completa.
Uno de los filósofos que más influyó en Zambrano fue el propio Nietzsche.
Cosa que Platón rechaza enérgicamente en el Mito de la Caverna, diciendo que sus cadenas nos impiden movernos al inicio de este mito.
Esto que acabo de escribir (no sé por qué) me recuerda a Cernuda, movido por sus pasiones y por su crítica a la situación de España y todos sus poemas que hablan del exilio desde el corazón.
Incluso yo podría hacer un símil entre ambos, incluso tomando esto como estilos distintos, como personalidades distintas, la persona que busca salir hacia delante (filósofo) y la que se queda en el recuerdo y la tristeza de la melancolía de manera perenne en su vida (el poeta).
Esto también lo encontramos en nuestra religión, los cristianos maltratan el cuerpo para intentar liberar al alma de ese pecador, es por ello por lo que vemos las clásicas flagelaciones o penitencias en Semana Santa.
Puede ser por ello por lo que haya tantos casos de ansiedad y depresión en esta época, ver que somos un proyecto a construir sin rumbo claro nos crea tal estrés que el cerebro es incapaz de asumir.
Ese tema lo trataremos cuando escriba sobre Escohotado y las drogas.